medios de comunicación como ElEconomista, Geriatricarea y Entremayores publican esta semana que la Comisión Europea ha presentado en Madrid el proyecto ACTIVAGE, una iniciativa que apuesta por el Internet de las Cosas (IoT) como herramienta para mejorar el cuidado de las personas mayores, favoreciendo el mantenimiento de su independencia y participación social, así como reducir el impacto negativo que implican enfermedades crónicas y el deterioro.
El aumento de la esperanza de vida y la baja tasa de natalidad en los países occidentales deriva en el acelerado envejecimiento de la población que hemos alcanzado, especialmente preocupante en Europa y, en concreto, en España, donde los mayores de 50 años (17,9 millones de personas) duplican a los menores de 18 (8,7 millones).
Este fenómeno demográfico, con fuertes implicaciones en el sistema sanitario, obliga a buscar soluciones que permitan mejorar el empoderamiento de los mayores y aumentar su autonomía. Por este motivo, la Comisión Europea ha apostado por la financiación del proyecto ACTIVAGE, en el marco del programa Horizonte 2020, una iniciativa que cuenta con 50 partners y estará coordinada por Medtronic, implicando a unos 7.200 usuarios y más de 43.000 dispositivos de Internet of Things (IoT).
Protecto Activage
El proyecto, que involucrará a cerca de 10.000 personas mayores en 7 países distintos de la Unión Europea (España, Italia, Reino Unido, Francia, Alemania, Grecia y Finlandia), cuenta con una financiación de 20 millones de euros y está enmarcado en el programa H2020 de la Comisión Europea
Además, cuenta con el apoyo de 49 organizaciones, de las cuales el 22% son industriales, 14 institutos de investigación o universidades punteras, 11 grandes compañías y 15 PYME’s altamente innovadoras y está coordinado por Medtronic Ibérica, bajo el auspicio de la Comisión Europea.
«Se han definido de forma clara las líneas de I+D+i que interesan desde una perspectiva europea global y común e involucrando a gran cantidad de actores externos. En este sentido, para la Comisión y para ACTIVAGE, la colaboración entre estos actores es básica para alcanzar los objetivos buscados», señala el coordinador de esta iniciativa, Germán Gutiérrez.
Mejora de la calidad de vida
Se trata de un proyecto de innovación que pretende crear y probar evidencia sustentada en indicadores de calidad, sobre el impacto positivo que va a tener el IoT en la mejora de la calidad, la salud, el bienestar y la independencia de las personas mayores, pero también sobre la sostenibilidad de los sistemas de salud y de cuidado sociales en los países de la Unión Europea.
Guillén afirma que esta iniciativa también tendrá una implicación directa en la competitividad de la industria y la creación de empleo, sobre todo en las PYME’s tecnológicas europeas, ya que se creará un espacio favorable para el desarrollo de nuevos productos y servicios en un mercado de 90 millones de personas.
«ACTIVAGE es un elemento importante en la ejecución de la estrategia de digitalización de la industria europea y del desarrollo sostenible de las tecnologías IoT inteoperables, seguras, confiables, que garanticen la privacidad y los derechos de los ciudadanos», explica Gutiérrez.
Tres fases
El proyecto consta de tres fases de pilotaje que permitirán disponer de la evidencia técnica y científica que confirme nuestras hipótesis o nos muestren las correcciones necesarias a los planteamientos iniciales. «En los últimos seis meses nos centraremos en la consolidación de los programas de crecimiento en cada zona y en que estos se conviertan en referencia para los otros países de la Unión», asegura el coordinador.
La implementacion de los pilotos en España se realizara en Madrid, Galicia y Valencia. La situación del envejecimiento de la población es complicada en España, donde los mayores de 50 años (17,9 millones de personas) duplican a los menores de 18 (8,7 millones) y obliga a buscar soluciones que permitan mejorar el empoderamiento de los mayores y aumentar su autonomía.
«Enfermedades antes mortales han pasado, felizmente a convertirse en crónicas, lo que está conduciendo a que las personas se involucren en el cuidado de salud sin la necesidad de que este se realice únicamente en los hospitales. La industria debe ser consciente de estos cambios, incorporando a sus propuestas clínicas cada vez más soluciones orientadas hacia el entorno doméstico», concluye el coordinador de ACTIVAGE.